ENCUENTROS DE SABIOS POPULARES

(PARTERAS, SOBANDEROS, CURANDEROS)

Objetivos:

·        Compartir experiencias e  intercambiar saberes para el bien colectivo.

·        Registrar y valorizar los testimonios revelados por las y los participantes.

·        Superar la subestimación que tiene el pueblo de su propio saber.

·        Propagar mensajes para el disfrute de una vida sencilla, plena y saludable.

·        Realizar demostraciones  vivenciales con base en el patrimonio natural.

Estamos empeñados en mejorar la existencia humana desde una perspectiva no convencional y complementaria de la ciencia, es decir,  desde un sector de la sociedad que reconoce la diversidad cultural,  otras visiones y otros sentidos.  Por ello nos importa reivindicar los aportes de la gente humilde y sencilla que, a lo largo de generaciones, ha aportado un recurso cultural valioso que merece preservarse, revitalizarse, transferirse y utilizarse.

Hoy sabemos que hay múltiples formas de inteligencia y que todas ellas son ricas y necesarias. En todos los pueblos y caseríos que prosperan en nuestra geografía nacional hay personas que destacan desde muy temprana edad por su fina sensibilidad y su clara inteligencia, y que poseen conocimientos muy precisos que sólo son factibles de obtener utilizando refinados recursos tecnológicos, como por ejemplo, el conocimiento que tienen los agricultores sobre el sistema estelar y su relación con la siembra.

Se trata de conocimientos fundados en aplicaciones o usos repetidos  que han prevalecido a lo largo del tiempo en las canciones,  leyendas, proverbios, refranes,  relatos, oraciones, danzas y tejidos. 

Tal saber no ha necesitado de las formalidades modernas para sobrevivir, pues se ha producido y mantenido en su pureza envolvente. Los sabios populares, previsores y compactados con el medio, han atesorado en su entendimiento las fórmulas mágicas para borrar la imagen de la muerte y conjurar los encantamientos peregrinos.

En los cuantro encuentros realizados hasta ahora,  parteras, sobanderos, curanderos y sabios populares han accedido a transmitir sus secretos para bien de la humanidad y en beneficio de la ciencia prospectiva y universal. Han revelado sin mezquindad ni recelo sus técnicas, muy simples, con las cuales han resuelto enigmas que cuesta mucho explicar por elementales y eficaces.

Así, por ejemplo, en el campo de la medicina este saber lo han puesto en práctica con base en sus oraciones y en las substancias naturales, convirtiéndose en aliados de la prevención de enfermedades y en amigos de los médicos y enfermeras que los respetan.

Por todo ello nos interesa  recopilar - antes de que lleguen a extinguirse - los testimonios  orales, las creencias y las prácticas que perviven desde orígenes remotos.  Nuestros experimentados ancianos lamentablemente se están llevando consigo los secretos de una sabiduría que no hemos valorizado en su justa medida y que vale la pena recoger y propagar.